Taller online de NUEVAS CONSTELACIONES FAMILIARES. SISTÉMICA Y EMOCIONES, el sábado 13 de 10:00 a 14:00 y de 16:00 a 20:00. Precio: 75 €.
«Las emociones alteran nuestra forma de ver el mundo y nuestra interpretación de las acciones de los demás».
(Paul Ekman, El rostro de las emociones)
«Tú emoción es desadaptativa cuando es un sentimiento antiguo desorganizador, que es recurrente a lo largo del tiempo, las situaciones y las relaciones. Ni te deja mejor, ni aumenta tu bienestar.
Es como un viejo amigo que siempre te mete en problemas. Lo conoces bien y puedes predecir lo que pasará. A veces, incluso lo nutres, pero eso nunca repercute en que las cosas mejoren. Te parece muy central, pero no es saludable. Es esa misma vieja sensación estancada de enfado, el enfado de no conseguir nunca lo que necesitas. Puede ser la soledad que resulta tan familiar o la dolorosa sensación de privación de la que parece que jamás te logras deshacer. Puede ser la intensa sensación de humillación tan conocida y tan desproporcionada, ante el más mínimo desaire. O puede ser esa recurrente sensación de devastación al recibir una crítica, aunque la crítica sea de poca importancia o incluso constructiva.
Los sentimientos desadaptativos son, a veces, bastante abrumadores y te absorben en su torbellino. Cualquier sentimiento difícil que te controla repetidamente, del que no puedes salir, probablemente no es sano. En general, aunque estos sentimientos se apoderen de ti y tiñan totalmente tu visión de la realidad, en algún nivel tú sabes que no te ayudan y que no son saludables. A menudo, estas respuestas emocionales no saludables parece muy intensas e incluso significativas, pero lo que resulta muy característico en ellas es que no suelen cambiar, mejorar o desaparecer. Esa constancia es su insignia principal. Además, no mejoran tu vida. Te hacen daño y perjudican tus relaciones. Al principio, puede ser que no veas cómo te hacen daño, pero con el paso del tiempo aprendes, casi siempre de la manera más dura, que no son buenas para ti.
Algunos ejemplos de sentimientos desadaptativos que puedes tener son: una profunda sensación de vulnerabilidad y miedo, una sensación básica de inseguridad, una sensación central del vergüenza o de falta de valía, o de sentirte no amado o no merecedor de amor. Con frecuencia, estos sentimientos están enmascarados por otros sentimientos más superficiales, como sentirte molesto, deprimido, irritable o frustrado».
(Leslie Greenberg, Emociones: una guía interna)